domingo, 2 de abril de 2017

Si aún te quiero.

Si aún te quiero es porque te recuerdo
antes del paraíso
sin conocer tu forma,
sin escuchar tu voz entre las multitudes.

Antes que Dios viniera
a esta ciudad sin norte
que hizo rumbo en la zozobra
te abracé en su vientre dolorido,
te lloré en sus rejas sin cancela.

Aún te amo, mi fiel enemiga,
sin saber si es el lunes o el recuerdo
quién me deja este lastre
en la memoria.

Sin desterrar los huertos, los ladridos
que sembraron de miedo las orillas
de mi barrio que no tenía tu amor,
y avivaron la sombra de la muerte.

Pensando en esta carga que me ahoga
y desborda la fiebre en mi costado.
Resistiendo las balas que salieron
de otras lenguas que no hablan, que no sienten.

Acogiendo en mi alma
tanta pólvora dispersa
que no tenía destino
y penetró en  mis heridas.

Si aún te amo es porque, destrozado,
el amor se resiste a abandonarme.

2 comentarios:

  1. También se puede amar al enemigo porque en el fondo nos aferramos a lo bueno que nos dejó su presencia.Las almas sensibles suelen actuar así ante los golpes de la vida.
    Aunque también puede ser que esa fiel enemiga sea la férrea soledad que acompaña siempre a quienes buscamos el amor sin descanso ni esperanza,quien sabe...
    Este es uno de esos poemas que,al leerlo,podría adivinar que es tuyo aunque no viera tu nombre bajo él.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Una palabra tuya, Joaquín, está más viva que 10.000 silencios, es una satisfacción que me acompaña. Este poema ni siquiera lo considero bueno pero es muy importante para mí, surgió después de la lectura de un ensayo sobre "Los heraldos negros" de César Vallejo y lo he modificado muchas veces, limando las aristas que me había transmitido el poeta peruano. Creo que me he equivocado pero cuando algo no convence debe intentarse hallar fórmulas desconocidas o lo que sea. En cuanto a ti tengo la impresión de que lo mejor de tu obra está por llegar, que eres joven y te has hecho a ti mismo. Me gusta la síntesis que persigues de fundir en un solo verso tu nostalgia amorosa de los trovadores, la preocupación por tu patria y la vasta cultura que atesoras.

      Un abrazo.

      Eliminar

Debo tener en cuenta lo que me dijiste algún día y no escuchar tu silencio de ahora.